En breve, los colegios empezarán las vacaciones que ponen fin al segundo trimestre académico y los padres disfrutarán de algunos días libres en el trabajo. La Semana Santa es un buen momento para disfrutar de tiempo de calidad con toda la familia.

Hoy, en Sentirse Bien Se Nota, te vamos a dar algunas ideas para que puedas aprovechar estos días de descanso realizando algunas actividades divertidas en familia.

 

Visita la Naturaleza

Si el tiempo acompaña, realizar una excursión en entornos naturales es una muy buena opción para salir de la rutina mientras disfrutamos de la compañía de los nuestros.

Cambiar de contexto a unos niños que están habituados a vivir en ambientes urbanos les ayudará a aumentar sus conocimientos  sobre la flora y la fauna, aprenderán la importancia de respetar el entorno natural y mejorarán su capacidad de orientación.

Las excursiones pueden ser una manera divertida de desconexión y relajación para toda la familia, a la vez que mejoramos nuestras condiciones físicas.

Si lo que buscas es una auténtica inmersión en la naturaleza, también tienes la posibilidad de practicar el agroturismo, es decir, alojarte unos días en una casa rural o un camping. También existen muchas opciones de granjas escuelas que realizan talleres para mayores y pequeños donde se puede aprender un poco más sobre el entorno que nos rodea.

 

Ir de museos

Las actividades para niños que realizan, cada vez más, diversos museos, son una gran oportunidad de complementar, de una manera divertida y didáctica, el aprendizaje infantil sobre arte, historia, tecnología o ciencia más allá del aula. Visitar estos museos realizando sus talleres y actividades infantiles es una buena manera de alimentar la mente de los más pequeños mediante experiencias divertidas. Además, si les demostramos que los museos también pueden ser lugares divertidos estarán más abiertos a visitarlos como otra actividad lúdica más.

Para que los niños puedan aprovechar totalmente la experiencia, es aconsejable ir introduciendo conceptos sobre lo que van a ver o visitar con unos días de antelación. De esta manera aumentaremos su motivación y fomentaremos su implicación para poner en práctica lo previamente aprendido.

 

Compartir momentos en la cocina

Cocinar en familia es una actividad llena de aprendizajes en un ambiente divertido. Elaborando recetas, los niños mejorarán su comprensión lectora, practicarán matemáticas, conocerán diferentes texturas gracias a los ingredientes y descubrirán nuevas posibilidades culinarias. Asimismo, aprenderán valores como el trabajo en equipo y mejorarán la confianza en ellos mismos al vivir la satisfacción de disfrutar del resultado final. Y, con la práctica, poco a poco afianzarán su autonomía.

Involucrar a los niños en la cocina también es una buena oportunidad para que aprendan la importancia de llevar una alimentación saludable y abre la posibilidad a introducir nuevos alimentos en su dieta.

 

Realizar manualidades

Si el tiempo no acompaña también hay muchas actividades divertidas y didácticas que se pueden practicar sin salir de casa. Realizar manualidades es una excelente oportunidad para estimular la parte más creativa de los niños, a la vez que estrechamos vínculos con ellos. Pintar con los dedos o con acuarelas, hacer manualidades con cerámica, hacer herbarios manuales con plantas recogidas en una excursión, o decorar huevos de Pascua, son solo algunas de las muchas posibilidades que tenemos para compartir un buen rato con ellos.

Con las manualidades, los niños practicarán su concentración, activarán su imaginación y creatividad y trabajarán su psicomotricidad.

 

Descubre un nuevo destino

Las vacaciones de Semana Santa nos dan la oportunidad de viajar y conocer nuevas culturas. Existen un gran número de ciudades que se pueden visitar en pocos días y que ponen al alcance muchas actividades infantiles. Roma, Ámsterdam, París, Valencia, Sevilla, Zaragoza… son muy buenos destinos que aúnan historia, arte, cultura y ocio.

Cuando los niños viajan a otra ciudad mejoran su capacidad de adaptación, de flexibilidad y de paciencia. Es importante hacerles partícipes de la organización del viaje y que tengan la posibilidad de aportar propuestas de actividades para que lo vivan con más ilusión.

 

¿Tienes otras ideas para pasar unas buenas vacaciones con tus niños? ¡Compártelas!